¿Qué celebran las Little Mix y qué tiene que ver con Leona Lewis? Análisis de Confetti, su nuevo disco



11 de diciembre de 2011, unas jóvenes y nerviosísimas Perrie, Jesy, Leigh-Anne y Jade interpretan Cannonball en la final de The X Factor. Nadie esperaba que llegaran tan lejos en el concurso, las girlbands nunca eran una competencia real para los solistas. Y, sin embargo y contra todo pronóstico, Dermot O'Leary pronunció esas palabras que lo cambiarían todo para ellas: “and the winner is… Little Mix”.


Y es que las pequeña mezcla nunca han sido una girlband usual. Para empezar porque son ya, la banda británica de mujeres más exitosa de la historia. Y también porque son una de las más longevas. Es por eso que LM5, su quito álbum (algo nada común en el panorama musical), fue en sí una celebración de las girlbands. Un homenaje a todas las que les precedieron, con sonido súper noventero y referencias constantes a las Spice Girls. Y sobre todo una forma de dejar su mensaje, porque si algo son las bandas de mujeres, son referentes para millones y millones de chicas jóvenes. De ahí que el disco tuviera letras tan potentes sobre sororidad entre mujeres, desigualdad salarial o auto-aceptación de nuestro cuerpo.

 

Sin embargo, no todo salió como esperaban. La discográfica, comandada por Simon Cowell (creador de The X Factor), impuso una promoción totalmente alejada de lo que ellas querían comunicar en ese momento. Todo esto acabó en una ruptura de un día para otro y el disco en un limbo en el que nadie quería apostar por él.



Después de esta larga introducción (creo que es importante conocer el contexto), llegamos a Confetti, su nada menos que sexto álbum, estrenando discográfica.

 

Break Up Song fue la canción elegida para dar el pistoletazo de salida a esta nueva era; un tema synth pop en el que se subieron a esa oleada de música retro, 80s en este caso. Y es que a simple vista, la temática del disco está muy clara: hablamos de una ruptura.

 

Sweet Melody, nos habla de “las bonitas palabras” que les decía ese chico. Un bop oscuro lleno de fuerza que ha conseguido levantar la era. Y en la genial Happiness, una canción más noventera con tintes trap, hablan de atreverse a hacer cambios para ser feliz, superando el miedo a poder quedarse solo.


Y qué decir de Gloves Up, una canción súper hip-hop que podría firmar Rihanna en Talk That Talk y en la que llegan con los guantes de boxeo puestos, listas para pelear.



Pero como ya os imaginaréis a estas alturas, esto no va de romper con “un chico”, sino de romper con su discográfica, con Simon Cowell y, sobre todo, con las ataduras de no poder dirigir su carrera. No es casualidad que directamente dediquen “Not A Pop Song” a criticar las canciones pop; o más bien, a reivindicar que una canción pop sí puede contar cosas y mandar un mensaje.

 

De eso va la canción Confetti, un tema súper oscuro y hip-hop, de deshacerte de alguien que no te deja brillar y hacerte oír. Lanzas el confeti como celebración, pero también porque ahora tú eres la reina de esta fiesta. “Ahora, me toca a mí”.

 

Si habéis seguido un poco la carrera de exconcursantes de The X Factor, puede que os suene una historia parecida. Fue en 2006 cuando una, también nerviosísima, Leona Lewis se proclamó ganadora del talent y rompió todos los charts con su single Bleeding Love. Ella y Simon Cowell tuvieron una relación complicada, con imposiciones tanto de canciones como de colaboraciones con DJs, hasta que después de su tercer disco Glassheart, Leona no pudo más y rompió con todo.

 

I Am, su siguiente disco, es lo que hoy es Confetti. Leona, al igual que Little Mix tuvo la necesidad de tener una catarsis en la que deshacerse de todo aquello y autoafirmarse. “Soy yo, contigo o sin ti”.  

 

Ambos apuestan a lo seguro, cada uno en su terreno. Por eso este disco está lleno de música pop actual, sin miramientos.




A Mess (Happy 4 U) hace una bonita referencia en sonidos a sus orígenes y If You Want My Love continúa la estela noventera de LM5 y eso se agradece. Es en este tipo de canciones donde la producción brilla, porque va en línea y aporta en lo que se quiere contar.

 

Sin embargo, hay otras como Nothing But My Feelings, un trap algo tosco, o Redenzvous, un tema algo más lento que calca la melodía de American Boy, que están lejos de ofrecer la frescura de las mezclas de LM5. Pero, sobre todo, la mayor pega es que no se sienten tan personales como deberían.

 

Hoy nueve años después, las Little Mix vuelven a lanzar confeti como aquella noche de 2011, dando carpetazo a esa etapa y celebrando un nuevo comienzo.

 

Confetti es un disco de auto-afirmación, con letras llenas de fuerza, nostálgicas e incluso enfadadas. Pero en el que, aunque está lleno de muy buen pop, falta que la producción también nos cuente algo.

 

Da la sensación de que, al igual que Leona, están en un proceso de encontrarse a sí mismas. Quizás, las vacaciones que mencionan en Holiday (“estar contigo es como estar de vacaciones”) no sean suficientes y necesiten parar un momento y tomárselo con calma para poder encontrar lo que andan buscando.






 


Comentarios

  1. Me gustan mucho tus artículos, me parecen muy interesantes.
    Espero seguir leyendote!

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